La obra más famosa de Antonio Gaudí dejará de ser el sueño inacabado más hermoso del mundo en 2026, cuando finalicen las obras de la Sagrada Familia, para convertirse en el edificio más alto de Barcelona gracias a la Torre de Jesucristo de 172,5 metros.
La Sagrada Familia es todo un símbolo de la ciudad y el monumento más visitado a pesar de estar en obras. La majestuosidad del edificio de Gaudí encandila no sólo por su apariencia exterior y sus ocho torres, sino también por la belleza de su interior. El juego de luces es una sinfonía de colores para dar vida al “templo de la luz armoniosa”, como lo definió el propio maestro de Reus. Las claraboyas y los grandes ventanales dejan entrar la luz del este, en las primeras horas del día, para crear un mosaico donde predominan los verdes y azules; mientras que por las tardes todo el protagonismo es para el clima cálido de los ocres y naranjas. El templo rebosa espiritualidad pero también naturaleza, un aspecto característico del estilo Gaudí.
2026, el antes y el después de la Sagrada Familia
El 2010 fue un año clave para la Sagrada Familia gracias a la consagración como basílica menor por el Papa Benedicto XVI que se tradujo en un aumento significativo del número de visitantes. Pero otro punto de inflexión se producirá en 2026. Será un antes y un después para el edificio de Gaudí y para toda la ciudad.
En 2026 habrán finalizado las obras tras más de un siglo de trabajos. Fue en 1883 cuando Gaudí tomó las riendas de un proyecto al que, tras su muerte, se sumaron numerosos arquitectos para dar vida al edificio que veremos acabado en menos de 10 años. Se procederá a la restauración de la fachada del Nacimiento para devolverla a 1930 y concluirán las obras de la Torre de Jesucristo. Las fotografías de la Sagrada Familia dejarán de tener unos invitados que la han acompañado durante años: los andamios y las grúas ya no formarán parte de la estampa de la basílica. Es fácil imaginar que muchos visitantes volverán a Barcelona para ver finalizado uno de los mayores reclamos turístico de la ciudad condal.
Pero al previsible aumento de turistas, para Barcelona se producirá otro cambio importante. Verá modificado su skyline. La Sagrada Familia pasará a ser el edificio más alto de la ciudad gracias a la torre de 172,5 metros de altura.
Si no puedes esperar a 2026 para ver en directo la imagen de la basílica, échale un vistazo al vídeo “construimos el futuro” que reproduce el aspecto en 3D de la Sagrada Familia en 2026.