Barcelona es una ciudad multicultural y cosmopolita forjada gracias a las aportaciones de todas las personas que se han ido instalando en ella a lo largo del tiempo junto a unas tradiciones y costumbres muy marcadas que han conformado una personalidad propia. Esa mezcla también tiene su fiel reflejo en la gastronomía, dando lugar a una variada oferta de restaurantes y bares que intentan conquistar los paladares de todos los visitantes gracias a sus creaciones de calidad. La cocina andaluza, la vasca, la ‘nouvelle cuisine’ francesa y, por supuesto, la mediterránea y la catalana, convergen en Barcelona para convertirse en un atractivo más de la ciudad.
Además de por sus restaurantes de prestigio mundial y por una cocina basada en la dieta mediterránea, España también es conocida por sus bares de tapas. La Ciudad Condal no es ajena a ello y cuenta con numerosos locales muy atractivos para disfrutar de un arte culinario en miniatura muy cuidado. Con el paso del tiempo, Barcelona ha visto cómo han surgido zonas casi exclusivas para tapear gracias al impulso hostelero que presenta en la actualidad una oferta muy sugerente.
Una de las zonas clásicas del tapeo en Barcelona es el Mercado del Borne, junto al parque de la Ciudadela y a escasos quince minutos del hotel HCC Montblanc. Más conocido como el Born, este barrio mezcla a la perfección algunos locales clásicos y muy auténticos con otros que apuestan por la modernidad y que se han ido abriendo paso poco a poco. En él podemos encontrar desde bares que homenajean a la cocina vasca y que nos trasladan a los mejores ‘pintxos’ que se hacen, por ejemplo, en San Sebastián o Bilbao, a otros que ofrecen los clásicos montaditos, y algunos en los que los que se le da una vuelta de tuerca a guisos de siempre como las albóndigas, la butifarra o la fideuá.
La zona del Born se ha fusionado con la del Barrio Gótico, donde en los últimos años han abierto numerosos bares de tapeo muy interesantes y que se unen a los atractivos turísticos de este lugar mágico de Barcelona. Las tapas más clásicas en vinotecas con mucha solera comparten calle con las más arriesgadas y modernas en espacios de constante creación.
Como en otras muchas capitales, los bares de tapas en la Ciudad Condal están localizados en lugares de un importante tirón para los turistas. Otro ejemplo es la zona de Las Ramblas, donde se asientan otro buen puñado de locales con muchos alicientes. Especialmente aconsejable es moverse por los alrededores del Mercado de la Boquería para disfrutar de las mejores elaboraciones caseras de Barcelona confeccionadas con mucho mimo.
El tapeo por la ciudad es incompleto si no se acude al barrio de Gracia. Es otro de los sectores clave en este viaje gastronómico. Gracia mezcla locales de cocina de diversos rincones del mundo con lugares muy creativos que dan mucho peso a la presentación de las tapas y a la decoración de los espacios.
Una zona que está emergiendo con fuerza en los últimos tiempos es el distrito del Ensanche. En un barrio en el que se encuentran los hoteles HCC Regente, Taber y St. Moritz, las tapas adquieren formas más alternativas y sofisticadas gracias a una serie de establecimientos que se quieren distinguir de los del resto Barcelona para darle un carácter propio a esta demarcación. Es una forma de huir de lo habitual y probar nuevas y arriesgadas propuestas para culminar otra etapa de este apasionante viaje culinario por el tapeo barcelonés.